martes, 7 de mayo de 2013

RUBENS, retrato de una niña


LA MANIFESTACIÓN ARTÍSTICA


Módulo 2. Actividad 3                                   LA MANIFESTACIÓN ARTÍSTICA:
ELEMENTOS ESTRUCTURALES
Autor: Luis Gerardo Chávez Godínez
Al decir «obra de arte», ¿qué es lo primero que piensas? Es muy probable que tu mente asocie rápidamente la idea con una imagen, quizás con una pintura, porque te has acostumbrado a relacionar el arte con ese tipo de obras. Pero debes saber que, además de la pintura, el arte tiene muchas otras maneras de manifestarse. Aquí te proponemos la frase «manifestación artística», para que tu idea de lo que es una obra de arte se extienda no sólo a las obras visibles, palpables y duraderas como son la arquitectura, pintura, fotografía, cine, escultura, artesanías y demás, sino también hacia las formas inmateriales y efímeras como pueden ser la música,la danza, la literatura y el teatro.
La manifestación artística es un fenómeno que ocurre cuando alguien quiere expresar una emoción importante, sus sentimientos sobre la vida o su percepción de la realidad, y se da cuenta que las palabras ordinarias no son suficientes, que un discurso normal, digamos de tipo descriptivo o científico, no le deja satisfecho. El sentimiento que experimenta es tan potente, tan complejo y tan inefable, que necesita encontrar otras maneras de comunicarse. Las personas con esa necesidad de expresión pueden comenzar con trabajos preliminares, por ejemplo, una partitura musical o el demo que graba un compositor con su guitarra el guión de una película, el borrador de un poema sobre un pedazo de papel, la maqueta de un edificio, los moldes de un escultor o de un artesano, los bocetos de un dibujante, la placa de un grabador, el negativo de una fotografía, los ensayos para la danza o el teatro. Estas obras ya son manifestaciones artísticas, son preparaciones, productos anticipados; pero todavía no se les puede llamar obras de arte, sino hasta el momento en que están completamente elaboradas y listas para ser exhibidas al público. Una «obra de arte» que se da por terminada y se presenta ante los demás, también es una «manifestación artística». Así que podemos utilizar indistintamente ambos términos para referirnos al arte producido en condiciones para ser expuesto a la luz pública, no importa si de momento, por alguna circunstancia especial, se hubiera quedado “guardado” y nadie lo haya visto todavía.
TIPOS DE MANIFESTACIONES ARTÍSTICAS
ARTES VISUALES O ESPACIALES:   Dibujo  Pintura  Fotografía  Grabado Escultura Artesanía  Arquitectura
ARTES AUDITIVAS O TEMPORALES: Música  Literatura
ARTES ESCENICAS O AUDIOVISUALES: Teatro  Danza  Ópera  Musicales  Cine Video
Como puedes darte cuenta, algunas manifestaciones del arte se pueden expresar en el espacio, son aquellas que se perciben con la vista, a veces también con el tacto (aunque en los museos no te dejen tocarlas). Hay otras que se expresan en el tiempo, las que se perciben con el oído; y, aunque son intangibles, tienen un gran poder de penetración (no puedes dejar de escuchar ciertas formas musicales, ruidos y discursos a tu alrededor, aunque te desagraden). Y claro, también existen manifestaciones que combinan las dos formas de expresión, en el tiempo y en el espacio, las cuales pueden ser escénicas o audiovisuales. Se supone que tienen mayor dificultad en su percepción, dado que exigen la coordinación de tus sentidos visual y auditivo. Sin embargo, seguramente has aprendido desde muy pequeño a entender la comunicación audiovisual, ya que siempre has tenido a tu alcance muchas expresiones que la utilizan (ya sean artísticas o no), tales como los programas de televisión, incluidos los comerciales, los dibujos animados, los clips musicales, los videos por Internet, los videojuegos y demás.
A final de cuentas, toda manifestación artística, ya sea que la puedas ver o no, aun cuando tan sólo la puedas escuchar, no deja de ser una entidad física compuesta de materia y de energía (como todo lo que hay en nuestro mundo). Casi siempre son obras únicas y originales, pero se pueden replicar con mayor o menor facilidad, dependiendo del caso. Por ejemplo, de una fotografía, de un grabado (o estampa), de una grabación musical, de un video o de una película se pueden hacer infinidad de copias (por cierto, di “no” a la piratería). En cambio, de una pintura o escultura, de un edificio arquitectónico, de un concierto en vivo o de una obra de teatro o de danza, ya no es tan sencillo. De hecho, sí se pueden hacer copias, o mejor dicho, se pueden repetir las obras; pero siempre ocurren variaciones a la hora de la hora, pues intervienen muchos factores durante la creación, que hacen difícil poder reproducirlas idénticamente.
De aquí puedes deducir otra gran división en cuanto a los tipos de arte. Hay obras creadas individualmente, donde una sola persona es capaz de realizarla de principio a fin, pero existen artes colectivas, donde necesariamente el o los artistas (pudiera ser una sola persona, o varias, quien planee y diseñe la manifestación) tienen que organizar un equipo de colaboradores, intérpretes o técnicos. El ejemplo típico son las artes escénicas o audiovisuales, donde la idea creativa puede salir de una sola persona, un dramaturgo o un guionista:, pero de ahí comienza a incorporarse mucha gente, desde un productor encargado de obtener los recursos y organizar el proyecto, diversos artistas como el director, el escenógrafo, el coreógrafo, el músico, el fotógrafo; intérpretes como son los actores, cantantes o bailarines; colaboradores técnicos, como el iluminador; el maquillista, el encargado de vestuario, el de efectos especiales, el sonidista, el camarógrafo y otros más.
ELEMENTOS ESTRUCTURALES
Observa a tu alrededor, todo lo que existe, ya sea natural o artificial, está estructurado. ¿Qué cosa es una estructura? Un todo compuesto de partes que se relacionan entre sí. Desde lo más pequeño hasta lo más grande, nuestro mundo está hecho de estructuras. Por ejemplo, un átomo es una pequeña estructura compuesta de un núcleo donde conviven protones y neutrones, los cuáles se relacionan con otras partículas llamadas electrones que giran a su alrededor. El planeta Tierra es una estructura compleja formada por un núcleo incandescente, un sustrato mineral que integra capas a su alrededor; un nivel externo llamado biosfera, donde emergen los continentes y los océanos, y una capa exterior compuesta de gases llamada atmósfera.
El ser humano está acostumbrado a este universo de estructuras armoniosas y organizadas. Cuando una estructura se desintegra sufrimos tremendas angustias: No te gusta que se desgasten tus zapatos, que se seque el arbolito que plantaste, se descomponga la televisión, se muera una persona querida, se derrumbe el edificio donde vives por un terremoto. Y es que el caos, la falta de estructura, es una amenaza que nos asusta. Para evadir ese miedo, andamos todo el tiempo en busca de las formas estructuradas. Tu mente pocas veces descansa, si no existe la estructura, la inventas. Si está inconclusa o dañada, tratas de completarla o la quieres reparar. Te sientes frustrado si te quitan el i-pod donde estabas escuchando una canción nueva que te gustó. Si alguien te cuenta un chisme a medias, te enojas. Si se va la luz a mitad de tu programa favorito te quieres morir. Lo que pasa es que estabas asimilando mentalmente las estructuras de aquella canción, de aquél chisme o de aquel programa; y ahora no te va a quedar más remedio que usar la imaginación o investigar por otro lado para completar lo que faltó (es decir, trabajar. Qué flojera, ¿no?). Este tipo de frustraciones han ocurrido siempre en la historia de la humanidad. Los seres humanos, por lo común, estamos insatisfechos con las estructuras que nos presenta la vida. Por eso construimos cosas, tratamos de cambiar las estructuras a nuestro gusto, o elaboramos nuevas estructuras que nos complazcan, que nos hagan sentir mejor. Muchas de esas formas artificiales que el ser humano ha creado son las que reciben el nombre de manifestaciones artísticas.
¿Qué se necesita para que una estructura se pueda considerar artística? Esta pregunta es muy delicada y difícil. Para darte una respuesta simple, la estructura artística necesita de magia. Si esto suena poco científico, lo sentimos. El arte es poco científico, pero tampoco está peleado con la ciencia. De hecho, las manifestaciones artísticas se han estudiado mucho científicamente, y los resultados han sido fructíferos, porque ayudan a comprender algunos aspectos de su naturaleza. Pero la magia del arte requiere de algo más que del análisis racional. Es como si, para comprender a la cebolla, para entender su efecto ambiguamente apetitoso y repulsivo, vas quitando las capas una por una, finalmente llegas al centro y en el centro no hay nada. Pero al menos has descubierto cómo se intercalan las capas de la cebolla, cuál es su color y su textura, y también has aprendido la experiencia de llorar por causa de las sustancias picantes que desprende la cebolla a la hora en que la estás despedazando.
¿Pero entonces, en qué consiste la magia? Es un efecto misterioso, envolvente y seductor que produce la obra en su conjunto. ¿Podemos saber más o menos de donde proviene ese efecto? Algunos artistas y científicos han investigado la cuestión.Leonardo da Vinci, por ejemplo, en su estudio sobre las proporciones de la figura humana, descubre que la estructura del cuerpo resulta armoniosa y embriagadora para los sentidos del que la contempla debido a que se ajusta a un principio geométrico, llamado la sección áurea. Sin entrar en detalles, los elementos de la estructura corporal, cabeza, torso y extremidades, están relacionados los unos con los otros, tanto en posición como en tamaño. De tal manera que existen valores numéricos exactos en las mediciones comparativas; y si la figura corporal se sale de esos patrones, la sensación que producen a la vista es desarmonía y deformidad. Imagínate el cuerpo de un enano, el de un travesti con polio o el de un mutante con cabeza cuadrada y cinco extremidades torcidas en posición de tarántula. Al margen de la compasión o de la simpatía que pueden despertar esas imágenes, estarás de acuerdo en que no son estructuras precisamente seductoras. Por eso quizás los artistas prefieren representar figuras humanas “normales”, que cumplan con las reglas de la proporción. Aunque no siempre sucede así.
Esto de la estructura bien proporcionada se extiende a otras estructuras artísticas no-humanas, como en la arquitectura o cualquiera otra de las artes visuales. Esto es, cuando no aparecen figuras humanas en la obra, según parece, los creadores aprenden las reglas o instintivamente expresan sus composiciones buscando un efecto armonioso. Lo mismo sucede en las artes auditivas y audiovisuales, donde se consigue dicho efecto mediante el cuidado de la melodía, del ritmo o la dosificación de los signos (informaciones) que se proporcionarán al espectador a través del avance temporal de la manifestación. Existe mayor armonía y una sensación más grata si te cuentan una historia, ya sea en una novela, una película o una obra de teatro de manera organizada y coherente. Es muy desagradable si te sueltan pistas falsas, te presentan personajes o sub-tramas que se quedan sin desarrollar. Por ejemplo, en una obra de suspenso, resulta que el héroe tenía una amiga que parecía que era traidora porque hacía cosas a sus espaldas. Y uno piensa que es aliada de sus enemigos; pero de repente deja de aparecer, sin ninguna explicación. El espectador se queda frustrado al no saber qué pasó con ella, cuál era su papel o para qué la pusieron en la obra.
Y aquí surge otro aspecto importante, que sin duda también es responsable de la magia: La manifestación artística debe estar bien organizada en su interior. Debe funcionar perfectamente y de manera creíble. La obra realizada por el artista tiene que ser como un universo en pequeño, o un pedazo de realidad, parecido al mundo que conoces; o quizás no tan parecido, tal vez como un sueño, o como una pesadilla. En todo caso, debe tener su lógica interna, para que te lo creas, te identifiques con él y te sientas atrapado o interesado de estarlo contemplando.
Toma en cuenta el hecho de que tú, como espectador del mundo o como espectador del arte, tienes que trabajar mentalmente para poderlos comprender.
Observa que tu mente casi nunca descansa. Lo más común es que estés ansioso por buscar el orden y el significado, la razón de las cosas. El arte es una oportunidad increíble para que desarrolles tu capacidad de prestar atención, de anticiparte a los hechos futuros, de extraer conclusiones y de construir un todo a partir de las piezas que lo componen; sensación que habrás experimentado seguramente cuando te involucras en un reto o un juego complicado. Por ejemplo, cuando intentas resolver un rompecabezas, cuando tratas de ganar una partida de ajedrez o cuando pasas a niveles más complejos, desconocidos, en algún videojuego como el «Príncipe de Persia». Los artistas conocen esa necesidad de tu mente, y se valen de ello para hechizarte, por eso utilizan la regla de construir estructuras coherentes y cargadas de múltiples significados.
Pero las reglas también pueden romperse, sobre todo en el arte. Y entonces, ¿será posible que aparezca la magia sin que se cumplan las reglas de la armonía y la perfección de la estructura? ¿Existe acaso un arte del caos y de la estructura descompuesta? Eso tendrás que responderlo tú. La magia es tan misteriosa que puede provocar su hechizo en el lugar que menos piensas y cuando menos te lo esperas.
Sea como fuere, la estructura artística dispone de ciertos componentes o elementos a los que no puede escapar: el lenguaje, formas diversas para cada tipo de arte, materia prima con que se elabora la obra, así como las técnicas, recursos o procedimientos para la realización de la misma. Componentes opcionales, de los que en cierto momento más o menos se puede prescindir, son la temática, mensaje o contenido de la obra, y la narración, personajes y acontecimientos que son relatados. Sin embargo, resulta riesgoso dejar de utilizarlos, porque la manifestación, sobre todo en ciertas artes, puede perder gran parte de su poder de seducción.

EL LENGUAJE ARTÍSTICO


EL LENGUAJE ARTÍSTICO
Autor: Luis Gerardo Chávez Godínez
Debes saber que todas las formas de arte habidas y por haber, han tenido siempre como finalidad principal la comunicación. Ningún artista realiza una obra que para él ha sido muy importante -porque ha puesto en ella parte de su propia vida y que además le ha costado tanto esfuerzo-, para esconderla debajo de la tierra. Por el contrario, el artista quiere sacar de su interior todo eso que le preocupa de sí mismo y del mundo que le rodea, para que otros compartan sus inquietudes. Es más, aún si el artista fuera un ermitaño y no tuviera el menor interés en mostrar su trabajo a los demás, la obra realizada por él comunica y, tarde o temprano, si la obra tiene calidad y alguien la encuentra, va a poder descubrir su encanto y extraer su mensaje. Entonces, si todas las manifestaciones artísticas sirven para comunicar algo (ideas, pensamientos, emociones, sentimientos, realidades), deben de tener un lenguaje. Y por supuesto que lo tienen. De hecho, cada tipo de manifestación tiene su propio lenguaje. Pero ¿qué cosa es un lenguaje? Es un sistema codificado de signos. Verás, para poder comunicarnos, los seres humanos tenemos que establecer acuerdos y darle significado a las cosas; entonces construimos sistemas de comunicación. Si usamos la voz o si usamos la mímica, debemos saber de antemano qué significado va a tener cada palabra o cada gesto. Las reglas que gobiernan esos significados, por ejemplo los nombres que les damos a las cosas,1 son precisamente los códigos. Y los signos vienen siendo las palabras o los gestos que utilizamos para comunicarnos.
Cada una de las expresiones artísticas tiene sus propios signos y también sus propios códigos. Revisa el cuadro siguiente que, de manera muy esquemática, te da un panorama de la riqueza de los lenguajes artísticos:

Manifestación
Signos
Códigos
Sistema
Dibujo y Pintura.

Trazos (líneas) sobre una
superficie. Formas, texturas y colores.


Uso de la proporción, de la perspectiva y la distribución de colores y elementos en el cuadro (composición). Ilusión de volumen mediante trucos de sombreado /  claroscuro, etc.

Lenguaje icónico
(hecho de imágenes).

Grabado.
Formas, colores y texturas estampados sobre una superficie.

Uso de la proporción, de la perspectiva y la composición en la imagen estampada.
Manejo de la apariencia tridimensional o deliberadamente plana.2
Intuición de la imagen negativa (por ejemplo, los vacíos de la placa son los espacios entintados en la estampa).

Lenguaje icónico.

Fotografía.
Formas, colores y luces, registrados mediante revelado o impresión digital.

Uso de la proporción, la perspectiva, la composición y la  sensación de volumen mediante trucos de  enfoque, de iluminación, filtros de color, etc.
Obtención de diversas coloraciones, texturas o grados de nitidez, mediante el control de la exposición, el uso de
diversos tipos de películas o emulsiones, o el tratamiento digital de
las imágenes.

Lenguaje icónico.

Escultura.
Formas
volumétricas y
texturas talladas o
modeladas.

Uso de la proporción, la composición
volumétrica y la ilusión de  movimiento.
Sujeto a las características del material
(maleabilidad o dureza, forma original y tamaño de la pieza).

Lenguaje icónico y táctil (hecho de
Imágenes palpables).


Arquitectura.
Espacios
volumétricos de
grandes
dimensiones.

Sentido práctico y estético de la
orientación, la distribución espacial y
los decorados internos y externos. Simbologías relacionadas con algunos
mitos y ritos sociales. Por ejemplo,
muchas construcciones, pirámides,
iglesias y palacios de distintas culturas,
fueron diseñadas para representar
jerarquías, ilustrar procesos cósmicos o propiciar fenómenos espirituales.

Lenguaje icónico
y percepción del
espacio ambiental.

Literatura.
Palabras.
Ordenamiento gramatical de las
palabras conocido como sintaxis: No tiene sentido decir: “Versos el olvido para trazando mano sigue la vieja”. Al corregir la sintaxis, el enunciado cobra sentido: “La vieja mano sigue trazando versos para el olvido” 3 Uso de los significados literal y metafórico, así como de los recursos poéticos (metro, ritmo y rima), para que el texto resulte sonoro y armonioso. En el siguiente ejemplo se puede reconocer que no basta con acumular palabras para expresar una idea como en el lenguaje ordinario, sino que además hay que combinarlas de tal
manera que la enunciación resulte
cadenciosa y mágica por la riqueza de las imágenes que evoca: «Al golpe del oro solar, estalla en astillas el vidrio del mar»4.

Lenguaje verbal
(poético y
narrativo).

Música.
Sonidos producidos
por instrumentos
musicales o la voz
humana.

Sucesión temporal de las notas
musicales,5 que generan una melodía, una armonía y un ritmo (se puede representar por escrito en una partitura). El orden en la combinación de las notas, los silencios y su repetición, tiene infinitas posibilidades, pero no todas ellas se reconocen como
música. Dependiendo de la cultura, es posible que se acepten como códigos musicales, los cantos simples, los ritmos sin melodía, inclusive los ruidos.
Uso de los distintos tipos de voces o instrumentos para generar rasgos de calidad sonora o timbres. Algunas expresiones musicales utilizan el acorde y el contrapunto como una manera de enriquecer o complejizar su estructura.6

Lenguaje musical
(hecho del
movimiento
organizado de
sonidos).

Cine.
Fotogramas
sucesivos que se
perciben como
imágenes en
movimiento, a la
par que un
registro de
sonidos.

Sucesión temporal de planos visuales y sonoros, sincronizados de tal forma que parezcan copiar exactamente las acciones del mundo real.7
Manejo del encuadre, la puesta en
escena, el montaje, la narración, las actuaciones, música y demás recursos.8

Lenguaje
cinematográfico
(hecho de
imágenes y
sonidos en
movimiento).
Teatro.
Personajes que
representan un
texto dramático
en el escenario
por medio de
diálogos y / o
acciones.

Uso de los elementos narrativos (trama y personajes) para referir una historia, situación o reflexión de vida. Ya sea con un sentido trágico, dramático, satírico o
humorístico.9
Procedimientos actorales y recursos técnicos diversos que se compaginan para lograr efectos de verosimilitud.10

Lenguaje teatral
(hecho de
momentos vivos
que imitan el
drama
existencial).

Danza.
Movimientos
corporales
rítmicos (por lo
general con
acompañamiento
musical).

Vocabularios preestablecidos de pasos y movimientos  generalmente usados en el Ballet y las danzas folclóricas de
occidente).
Gestos, actitudes y posturas con
intenciones simbólicas  frecuentemente usados en las danzas orientales y la danza contemporánea).
Diseños coreográficos que demarcan la utilización del espacio escénico e incluyen recursos de vestuario, decorados, iluminación y demás.

Lenguaje
corporal (basado
en la repetición
de movimientos
con patrones
rítmicos acordes
a la música, si la
hay).

Ópera y
Musicales.

Personajes que
representan una
trama dramática
por medio del
canto, la
actuación y, a
veces, el baile.

Elementos narrativos (igual que en el teatro), en tono trágico o en tono de comedia. Convención de no respetar el realismo por el uso de los diálogos cantados, los
bailes y los fondos musicales en exceso (que interrumpen el desarrollo Narrativo)

Lenguaje del
teatro musical
(hecho de
escenas vistosas
que parodian el
drama de la
vida).
Artesanías.

Volúmenes y
texturas.
Regularmente
coloridos,
con materiales y
técnicas diversas.

Uso de la intuición popular en la
elaboración de objetos cotidianos, para engalanarlos, e ir más allá del uso práctico que puedan tener.
Los códigos utilizados por los artesanos tienen que ver con las tradiciones y costumbres regionales de la cultura a que pertenecen.

Lenguaje icónico
y táctil (hecho de
imágenes
palpables).



1 Si una sociedad de habla hispana ha decidido utilizar la palabra “gato” para referirse a un felino doméstico; pero también a una herramienta para cambiar llantas, y también para nombrar despectivamente a una persona servil, está bien. Ese es precisamente el código en el que todos se han puesto de acuerdo, e identifican la diferencia de significado porque la misma palabra se utiliza en diferentes contextos.
2 La viabilidad para lograr ciertas texturas o efectos volumétricos está sujeta al método utilizado. Difiere para el grabado en relieve o en hueco, la impresión planográfica o litografía, la monotipia, estarcido o serigrafía.
3 Este pequeño texto es un Haiku, forma poética muy breve y evocativa originaria del Japón, pero cultivada por muchos grandes escritores latinoamericanos, como en este caso el argentino Jorge Luis Borges.
4 Haiku del mexicano José Juan Tablada, prosista y poeta de la primera mitad del siglo XX, quien introdujo esta clase de poesía a nuestro país.
5 La nota es la unidad mínima de organización musical y consiste en un sonido con un tono y duración específicos.
6 Estas dos propiedades se logran mediante el sonido simultáneo de timbres diferentes en una misma melodía
(acorde), o melodías relacionadas (contrapunto).7 El plano se define como la captura sucesiva de imágenes o de sonidos antes de un corte. Los planos se eslabonan o se montan, de acuerdo a ciertas reglas establecidas, según el criterio de la credibilidad.
8 Cada uno de los elementos mencionados tiene sus propias reglas y todas aportan al código del cine que, aunque es muy complejo, lo podemos entender fácilmente por su parecido con la vida real.
9 La trama consiste en la línea argumental, es decir, la sucesión de acontecimientos narrados a través de las acciones, de los diálogos o simplemente las actitudes y la mímica. Los personajes no necesitan ser humanos, se pueden substituir por títeres de distintas clases, incluso por sombras.
10 Existen muchos estilos de actuación, para la construcción del personaje o la expresión en el escenario, como son la técnica vivencial de Stanislavski, o la actuación distanciada de Brecht, en el caso de actores humanos; y otros tantos procedimientos para el diseño y manejo de marionetas. Entre los recursos adicionales utilizados para que la representación sea creíble o impactante, se encuentran el vestuario, el maquillaje, los decorados, los accesorios, la iluminación, la música, los efectos especiales y las tecnologías multimedia.
11 Podrías entender que este grabado representa algunas inquietudes esotéricas que tuvieron mucho auge a finales del siglo XIX, a través de un sistema llamado Teosofía, basado en el principio de que el ser humano busca su afirmación en la exploración espiritual, el encuentro con su Dios interior conectado con el Dios infinito, absoluto e incomprensible que genera todo cuanto existe. Descubrirías que el ojo abierto mirando hacia arriba es un símbolo del anhelo por alcanzar esa conexión con lo más elevado, y poder separarse del pantano oscuro de sufrimiento y desolación en la tierra, aunque detenido por un lastre, una especie de calavera suspendida por la red del globo, que representa los deseos, las pasiones vitales que nos atormentan, que nos atrapan en la realidad fantasmagórica del mundo en que vivimos, y cuya cara oculta no es otra que la  de la muerte

Los signos y códigos de los diferentes lenguajes artísticos deben ser manejados no solamente por los artistas; sino que tú, como público, debes comprenderlos también. De lo contrario la comunicación no se puede completar. Entonces resulta que si no eres  competente en la lectura de alguna de las artes, te pasa lo mismo que a los que no hablan un idioma: se quedan pasmados y no saben qué hacer; o mejor se retiran contrariados por su ignorancia.
Observa la litografía contigua. Cuando esta imagen se ha puesto a consideración de otros estudiantes de tu edad, han sido capaces de expresar alguna emoción que les produce, por ejemplo, “terror a lo desconocido”, “tristeza infinita”, “suspenso infernal”, “sonrisa del alma”, “sabiduría divina” o “misterio inexplicable”. Esta es una primera lectura, que tiene su valor; pero si investigas un poco más al respecto de la obra, de su autor o de su contexto, puedes acceder a una lectura más profunda y a una interpretación más completa de sus  significados.11
Lo bueno de las manifestaciones artísticas es que sus lenguajes, después de todo, no son tan complicados. Cualquiera puede entender lo básico; pero claro, es preferible adquirir habilidad en la lectura de sus lenguajes específicos y llegar a comprenderlos a fondo. Entonces te puedes volver cómplice de los artistas, entrar  con mayor facilidad en su mundo imaginario, compartir sus emociones, sueños, fantasías y disfrutar de su magia. No para escapar de la realidad, sino para captarla mejor, para sentir que algo se ilumina en tu interior (como cuando dices “me cayó el veinte” o “se me prendió el foco”); para volver tu propia vida más intensa, más interesante o más tolerable. En resumen, la manifestación artística es una estructura hecha de signos ordenados por medio de un lenguaje que comparten muchas personas. El valor de la manifestación crece si aumenta el número de individuos capaces de entender el código utilizado. Una obra de arte construida con inteligencia tiene riqueza en su lenguaje y permite que muchas personas puedan leerla. Claro que si eres un lector inteligente de las manifestaciones artísticas, podrás entenderlas mejor y sacarles mayor provecho. Ese provecho significa que te vas a enriquecer espiritualmente, crecerán tu cultura y tu conciencia de la realidad, y entonces aumentará tu calidad humana. A lo mejor no habías pensado en ese beneficio. Tal vez ahora no te “late”, ni te llama la atención, pero si llegas a experimentarlo, ten por seguro que no te vas a arrepentir.
¿Y sabes qué necesitas para aumentar tu destreza en la lectura y comprensión de las manifestaciones artísticas? La respuesta más obvia y más simple es acercarte a las obras. Mientras mayor sea el número y la calidad de las manifestaciones que observes, mejor. ¿Y cómo te vas a dar cuenta de su nivel de calidad? Eso lo irás descubriendo mediante el contacto frecuente con las obras artísticas; conforme avance tu experiencia y a través de la adquisición de conocimientos y habilidades relacionados con la apreciación del arte. Pronto te darás cuenta de que hay obras que te dejan insatisfecho. Que pueden ser muy llamativas, pero son muy simples o están vacías. Su estructura no tiene magia y tienen poco que decirte. En cambio, hay otras que te atrapan en el remolino de su estructura y tienen mucho que comunicarte; que mientras más las contemplas, más cosas les encuentras y provocan en tu interior revoluciones, tal vez alguna crisis o alguna duda importante que finalmente te hace reflexionar, ver y entender la vida de manera diferente.